Negra faz de mujer,aliento de hombre,centauro con negro destino que escarba en los últimos suspiros .
Dignidad libre de culpa, sin derretirse ante las lágrimas y lamentos del destino que lleva.
Viste el cuerpo de la soledad ante la luz tenue que poco a poco se derrama en cuerpos que se van perdiendo y alcazan la forma de la nada.
Abstracta entre el infinito sin forma.
Vaga con el aire y no se desgasta.
No hay espejo que refleje su forma,
su imagen alienta el miedo de los vivos.
Ahí está ,con música de órgano
y olor a incienso .
Entre Biblias y Dioses
está su pasado escrito.